El próximo martes 5 de noviembre será un día muy importante para el mundo, ya que se elegirá al nuevo presidente de los Estados Unidos y se descubrirá quién obtendrá la victoria entre la demócrata Kamala Harris, actual vicepresidenta de la nación, y el republicano Donald Trump, quien fue el primer mandatario desde el 2017 hasta el 2021.
En este contexto, aunque queda poco tiempo y ambos candidatos estuvieron haciendo campaña desde hace varios meses, el mercado todavía tiene dudas porque no es lo mismo decir que hacer.
“La mayor incertidumbre gira en torno a la vicepresidenta Kamala Harris, candidata presidencial del partido demócrata. De acuerdo con analistas políticos expertos, su historial de votaciones en el Senado suele ser progresista y de izquierda. Sin embargo, las propuestas mencionadas en su campaña la ubican con un perfil mucho más moderado. Con Trump hay menos incertidumbre porque ya fue presidente”, relató Maximiliano Donzelli, jefe de Estrategias de Inversión en Invertir Online.
En líneas generales, Trump propone una reducción general en los impuestos financiada con un incremento general en los aranceles a las importaciones (es decir, mayor proteccionismo). En cambio, Harris apunta a recortar los impuestos de los habitantes de menores ingresos a la vez que sube los impuestos corporativos y los de los habitantes más adinerados.
Pero la incertidumbre no termina acá, ya que también es fundamental la composición del Congreso debido a que gracias a él se determina si los planes más extremos de los candidatos avanzan o se estancan.
Es importante entender que el próximo presidente de Estados Unidos no sólo tendrá un claro impacto en la propia economía del país, sino que influirá, directa e indirectamente, en el desarrollo de otras naciones, y Argentina no es la excepción.
En este contexto, Adrián Moreno, economista y asesor financiero en Sailing Inversiones, detalló que a la economía argentina le convendría que gane Donald Trump, especialmente para “destrabar un acaudalado ingreso de fondos frescos”. “Con Javier Milei teniendo un acercamiento hacia el líder republicano, desde la Casa Blanca podrían influir para que se le otorgue una cifra más abultada de dólares que si la ganadora resultase Harris”, declaró el experto.
“Entre los dos candidatos, sería más beneficiosa una victoria del candidato republicano Donald Trump, debido a la afinidad ideológica que comparte con Milei. Es importante recordar que Estados Unidos cuenta con una participación relevante en el Fondo Monetario Internacional (FMI), y la afinidad entre Trump y Milei podría ser clave para el armado de un plan con el organismo”, coincidió Pedro Moreyra, director de Guardian Capital.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que en Estados Unidos se encuentra la Reserva Federal (Fed), la institución que controla la política monetaria del país y cuyos costos de endeudamiento se toman de referencia a nivel global. Por este motivo, el aparente control de Trump sobre el organismo para no elevar ni mantener altas las tasas de interés por demasiado tiempo podría ser otro punto a favor para Argentina.
“Si suben las tasas, se fortalece el dólar y se perjudica el precio internacional de los commodities. Si el precio internacional de los commodities se perjudica, se perjudican las economías emergentes. Entonces, es mejor la política de Trump para Latinoamérica que la política de Harris”, señaló Mariano Pantanetti, docente en el Programa Avanzado de Finanzas de la Universidad Nacional de la Plata (UNLP).
De todas formas, una victoria del republicano también genera dudas por su postura más proteccionista caracterizada por mayores aranceles a ciertos productos chinos y de otros países importados.
“Si las medidas nacionalistas de Trump se vinculan con aminorar el ingreso de productos importados, podría haber una pérdida de exportaciones para la Argentina considerable, aunque seguramente el foco se centrará en China. Si el apoyo de Estados Unidos hacia la Argentina se hace presente de la mano de Trump, probablemente esos flujos de divisas le permitan a nuestro país blindar el ámbito cambiario y concretar en 2025 la salida del cepo que atraerá grandes capitales, posibilitando una recuperación más rápida del sector privado”, comentó Moreno.
Aún así, los pros son más fuertes que las contras, por lo que se cree que los activos financieros argentinos podrían responder favorablemente a una reelección de Trump. “Trump se mantiene como el candidato que ofrece mayores desregulaciones para la industria financiera y más amigable con el sector energético tradicional, lo cuál podría ser positivo para el potencial energético que tiene Argentina, el cual se ubica como uno de los grandes drivers para el fortalecimiento local”, indicó Moreyra.
“Si gana Trump, sería una notición para los mercados en Argentina, fundamentalmente para lo que es el mercado de bonos. Las acciones ya están altas, están en valores que tienen un techo bajo, a diferencia de los bonos que tienen un techo alto, mucho todavía para subir y, por lo tanto, bajar el riesgo de país”, sostuvo Mariano Sardáns, director ejecutivo de FDI Gerenciadora de Patrimonios.
En caso de que se recuperen los bonos y el riesgo país baje, habría un explícito y positivo impacto en la economía real: “La baja del riesgo país implica que todo vale más. Un proyecto, un flujo de fondo, una empresa. En lo que va del año, el riesgo país cayó un 50%, eso quiere decir que hoy una empresa en Argentina vale aproximadamente el doble de lo que valía a principios de año. Al bajar el riesgo país, obviamente eso significa mayores inversiones en Argentina, entrada de divisas, mayor apreciación del tipo de cambio, mayor suba de salarios y sería todo un círculo virtuoso para Argentina, que es lo que necesita seguir logrando”.
Fuente: Forbes