Fecha: 30 de mayo, 2019
Que la Argentina tiene un esquema impositivo intrincado es un mantra que repiten economistas, tributarias y especialistas en finanzas por igual desde hace años. En esa jungla de gravámenes, una exención es un alivio incluso en una economía que no para de mostrar indicadores en rojo. Esa es la opinión generalizada de quienes manejan inversiones.
Los referentes privados ven ganador indiscutible al sector inmobiliario, sobre todo por la reglamentación del artículo 206, que apunta a la vivienda social. Villarroel ve mayores oportunidades para el desarrollo del crédito hipotecario, que cae desde la crisis cambiaria de 2018, y también para algunos fondos relacionados con el agro.
Su colega Fernando Díaz, de FDI, no tiene una opinión tan mainstream: apuesta por la industria forestal, donde “hacen falta inversiones que se fueron a Uruguay por su tratamiento impositivo más favorable”, aclaró.
En definitiva, de acuerdo con Juan Politi, vicepresidente de Allaria Ledesma Fondos, es un incentivo para que más fondos cerrados salgan a la cancha. “Este decreto indica qué requisitos específicos hay que tener para gozar de beneficios, por lo que si había alguno esperando para salir la medida viene a complementar el marco regulatorio”, aclaró. La CNV asegura que hay más de 15 fondos en esa posición.